Tu gato probablemente no sea muy amigable si le revisas los dientes, pero de vez en cuando no estaría mal que te prestases atención para evitar problemas futuros. ¿Por donde empezar? Lo primero que vas a necesitar son tiras de gasa estériles o un cepillo de dientes de goma suave, pasta de dientes especial para gatos y, por supuesto, muuuuucha paciencia.

Normalmente, el cepillado dental lo asociamos más a perros que a gatos, ¡nada de eso! Aunque los gatos suelen ser extremadamente limpios de por si, van a necesitar un poco de ayuda cuando se trata de dentaduras brillantes. Si prestas atención a sus dientes pronto, podrías evitar problemas futuros como el esceso de sarro, la gingivitis, la periodontitis u otras infecciones de carácter más grave.
Ten a mano un cepillo de dientes específico o unas gasas ( estas pueden cumplir la función de cepillo, sólo tienes que tener cuidado al enrollarla en tu dedo índice ) y una pasta de dientes específica (no la de los humanos). Si para tu felino es la primera vez pasando por esto, es mejor que empieces por cepillarle uno o dos dientes, irás aumentando poco a poco con cada vez para evitar posibles miedos.

¿Cómo cepillar los dientes?

  1. Muuucha relajación. Primero consigue que se sienta en calma y relajado.
  2. Levanta su labio superior suavemente y cepilla de forma delicada y descendente la parte exteior de los dientes-
  3. Puedes emplear tu pulgar e índice para tratar de que tu gato abra un poco la boca, pero con mucha delicadeza.
  4. Debes seguir con la cara interior de los dientes, haciendo lo mismo que con el exteior.
  5. Al acabar, muchos mimos y un poquito de agua.

¿Cuándo cepillarlos?

Difícil cuestión, porque la respuesta varía. Debes cepillarlo en función al sarro que acumule el felino o de si le gusta mucho o poco hacerlo. Lo ideal sería cada día, pero una o dos veces por semana es suficiente para mantener una higiene adecuada.
Recuerda ser muy suave y amable, pues no todos los felinos reaccionan igual de bien. Si por algún motivo ves que se está volviendo imposible hacerlo, te recomendamos que recurras a tu veterinario para que él pueda evaluar el estado de sus dientes y encías, dependiendo de los que diga, debes programar una limpieza dental clínica.

¿Cómo puedo limpiarle los dientes sin que me arañe o huya al fin del mundo?

Lo ideal sería que desde su periodo de socialización comiences a habituarlo, poco poco, así conseguirás que acepte este proceso de forma positiva. La gran mayoría comienza a hacer esto cuando el gato ya es adulto, por eso es normal que huya horrorizado cuando nos ve con un cepillo, ¡incluso llevarte algún arañazo!

Crea un ambiente tranquito, que tu gato se sienta lo más cómodo posible. El refuerzo positivo será un gran aliado, palabras bonitas, mimos y caricias.

Otros cuidados que puedes ofrecerle.

Una adecuada alimentación también puede ayudarte a cuidar sus diente. Por ejemplo, la comida en seco es una buena opción para mantenerlos limpios, pues cuando mastica, el alimento actúa como cepillo y limpia sus dientes, eliminando la placa.

Otra opción son los snacks diseñados específicamente para combatir el sarro, busca en una tienda y verás que hay cientos de apuestas.

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